INOCENTE REFLEJO
INOCENTE REFLEJO
Somos el reflejo o más bien la sumatoria de muchos reflejos.
Somos el reflejo de nuestros miedos, sueños, dolor, amor, llanto, alegría, risa, generosidad, egoísmo, cobardía, valor, arrogancia, soberbia, humildad, terquedad, reflexión, ignorancia, entendimiento y un sin número de sentimientos, emociones y situaciones más… y si juntamos todos estos reflejos que alimentan nuestro ego en un solo cóctel de incertidumbre y miedo, obtendremos un resultado susceptible de ser detonado por la impotencia del que mucho quiere hacer y no lo consigue, quedando a un paso de la furia y la ira; esa ira que nos obnubila haciéndonos perder de manera temporal la capacidad de razonar y ver con claridad el dolor y las heridas que no son propias.
¿Cuántas veces una simple palabra, una coma en el lugar incorrecto, un tono de voz inadecuado o simplemente el silencio no guardado, pueden detonar en dos seres que se aman una guerra a muerte?, sin prever que toda guerra trae consigo la muerte del inocente.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPgxqRo_MxVweWSLMkutvV4LRddiziMqDepu9k3KOV-ZJM2_z-_kT-mGcWoozQFXm_2ftwRjcna3OkMMjtHsdomckQrb6zeUpBVsX_47gAqEoI92j_g6RW9GYFlfnjtzeLEB06_40lOTM/s400/a85a8721b51b526de2a326b09f941785.jpg)
¿Recuerdas cómo empezó todo?
Tú estabas tan lejos, yo estaba tan sola,
el viento rugió, la tempestad se precipitó.
Tu miedo afloró y al silencio increpó.
Mi herida sangró y mi dolor gritó.
La razón se obnubiló,
el desconcierto al orgullo izó.
Las palabras invocaron a la discordia
y el caos reinó.
El silencio a la prudencia no encontró,
la ira al amor colonizó.
el caos de tu dolor al amor los ojos le cerraron
y a tus oídos ensordeció.
Mi voz no te alcanzó
y la tuya con furia retumbó:
“No te deseo nada...nada bueno, solo eres fachada"
PIA ARIZAL
Comentarios
Publicar un comentario