SILENCIO

 SILENCIO

Es una noche como hace mucho no tenía: mi apartamento solo, totalmente a oscuras, mi habitación en penumbras, una copa de vodka en mi mesa de noche y algo de blues acompañando el suave golpe del teclado en mi portátil... me quedo inmóvil y tan solo puedo imaginarte frente a mí, ¿si tan solo te tuviera frente a mí qué te diría? 

Te diría que hoy no fue un día especial, fue un día como todos los que he tenido desde que ya no estás, también te diría que después de 6 meses y 19 días por fin entendí porque dolías.

Y es que pasé muchas noches, días, horas, instantes abrumadoramente eternos sin lograr entender porqué tanta rabia, tanta ira, tantas ganas de venganza, tanto deseo de ver tu caída, tantas lágrimas, tantos gritos, tantos reproches, tanto y tanto de todo, pero sobre todo tanto silencio.

Te diría que he pasado noches meditando o al menos tratando de hacerlo pero todo ha sido en vano porque siempre volvía al recuerdo de tu traición, de tus mentiras, de todo lo que hiciste antes de dejarme y del modo en que lo hiciste, y de todo lo que has hecho después de aquel día... 

Pero hoy, mientras conducía rompí el silencio y le dije a mi amiga: "No existe un instante del día en que no lo recuerde", a lo que ella me respondió: "quizás aún estás enamorada o es un simple apego sexual..." guardé silencio y al cabo de un largo rato le dije: "No, no es amor, no al menos el que sienten las parejas cuando dicen estar enamoradas, tampoco es un apego sexual porque no pienso en eso, ni tampoco lo extraño en ese sentido, es más ni siquiera me afecta saberlo con la niña por la cual me engañó y dejó, lo que sí te puedo asegurar es que en un día como hoy extraño verlo, oír su voz, poder hablar de todo un poco con él, escuchar con atención todo lo que podría contarme, compartirle lo que ha pasado en mi día a medida que bebemos una copa de vino, una tras otra, y reír, y luego simplemente guardar silencio y sentir que no existe un momento más perfecto mientras suena una canción que él cantaría del modo más desafinado, a lo cual simplemente yo sonreiría."

Y así, simplemente así, entendí el porqué aún dolías.

SILENCIO

Fue el silencio de la falta cometida.

Fue el silencio del que todo lo sabe.

Fue el silencio de la palabra en espera.

Fue la ausencia del momento oportuno en una batalla ya perdida.

PIA ARIZAL